miércoles, 19 de junio de 2013

Same way, different people.

Estoy segura de que si mucho echamos la vista atrás veremos errores, uno tras otro, errores que muchos quieren remediar rezando porque una mente privilegiada invente alguna forma de volver atrás en el tiempo.
Puede parecer increible, pero yo nunca volvería atrás, para nada, y lo digo sinceramente.
¿Por qué? la respuesta creo que es cuanto menos simple. No es que yo no haya cometido ningún error en mis 18 años de vida, ni que sean insignificantes, ni que, en algún momento, no me haya arrepentido de ellos, si dijera que si mentiría la verdad.
Simplemente creo que gracias a todos aquellos errores que cometí en el pasado soy quien soy ahora, si es verdad que gracias a esos errores ahora me toca finalizar una etapa de mi vida y comenzar casi de 0, si es verdad que esos errores me dieron una fama que quizá ni yo misma quería pero supongo que todo forma parte de madurar.
Pero volviendo la vista atrás también te das cuenta que detrás de cada error hay una persona.
A parte de todas las personas a las que yo misma hice daño con mis errores hay una persona que siempre estuvo ahí, que siempre ignoró las opiniones de los demás, mi fama de lo que no era y siempre dio la cara para defenderme.
Si es verdad que igual algunas situaciones se me fueron de las manos, pero yo era y soy así, me gusta salir ganando aunque 20 personas tengan que perder y solo confio en mi misma cuando tengo a alguien al lado que confia ciegamente en que soy capaz de hacerlo.
Puedo haberle fallado a mucha gente, pero la verdad es que todas las mentiras de las que he sido complice y en todo lo que he ayudado a las personas que quiero auqnue fuera con fines de hacer daño a los demás forman parte de mi pasado y en parte puedo estar orgullosa de ser lo que soy hoy y de que ninguna persona pueda jugarmela sin que yo la descubra antes.
Ese es solo mi caso, el de aprender a calar a las personas con solo verlas, pero seguro que cada persona es diferente y sé que después de esto podeis ver los errores de otra forma, como algo positivo que os ha hecho cambiar a mejor y ser lo que sois ahora. No vale la pena arrepentirte eternamente de un pasado que no se puede cambiar, incluso me atrevo a decir, como he dicho antes, que no hay razones para arrepentirse, todos cometemos errores para aprender y solo queda seguir adelante.
Lo mismo pasa con los errores de situaciones que se nos han ido de las manos ¿a quién no le a pasado?
Pero, ¿sabéis qué? cuando una situación se va de las manos y cuando la paras ya es demasiado tarde o cuando el destino te castiga de manera demasiado cruel que sientes que el mundo se te echa encima y simplemente te arrastra al fondo de un hondo pozo, cuando sales, cuando te das cuenta de que eres más fuerte, en la superficie de ese pozo encuentras a gente que de verdad ha confiado en ti que te ha estado tirando cuerdas desde arriba para salir de ese pozo y que te quieren simplemente por lo que eres, que les da igual todo lo demás y que siempre vas a estar ahí, para que, la próxima vez, no llegues a caer de ese pozo. Esas personas son tu casa, tu familia, aunque algunas no lleven tu sangre, tu reino que esta dispuesto a perdonarte y a empezar de 0 contigo.